PROYECTO DE RESOLUCIÓN
Art. 1: Dispónese que el Departamento Ejecutivo Municipal evalúe la factibilidad técnica, operativa y económica de realizar los estudios que resulten necesarios para actualizar el Plan Director de Desagües Pluviales de la ciudad de Santa Fe, considerando los siguientes parámetros:
- Las variaciones en el régimen de lluvias y los efectos del cambio y la variabilidad climáticos.
- El crecimiento urbano expansivo de la ciudad y su área metropolitana que ha incrementado las áreas impermeabilizadas y modificado el uso de la tierra.
- Las nuevas pautas de diseño de medidas de mitigación estructurales que buscan disminuir y desacelerar el escurrimiento a través del retardo, mediante sistemas de almacenamiento, evapotranspiración o infiltración. Particularmente, analizando la conveniencia de diseñar un Sistema de Gestión y Mitigación de Riesgos para la ciudad de Santa Fe, que incorpore al Plan Director de Desagües Pluviales, los retardadores públicos domiciliarios y los retardadores Públicos que pueden ejecutarse considerando el informe del estudio de zonas críticas por inundaciones frecuentes en la ciudad de Santa Fe, realizado por el Instituto Nacional de Agua (I.N.A.) en el marco de lo dispuesto por la Resolución HC.M Nª 14716.
- Las oportunidades que presentan medidas de adaptación para complementar el Sistema referido en el inciso precedente, con la promoción de soluciones basadas en la naturaleza, infraestructura verde o sistema urbano de drenaje sostenible.
Art. 2: En caso de resultar favorable lo solicitado en el artículo precedente, encomiendese al Departamento Ejecutivo Municipal la realizaciòn de los estudios mencionados.
A tales efectos, autorízase la suscripción de convenios de colaboración con el Instituto Nacional del Agua, con la Facultad Ingeniería y Ciencias Hídricas de la Universidad Nacional del Litoral y con el CERVACAM (Centro de estudios de Variabilidad y Cambio Climático).
Art. 3: Ejecutadas que resulten las tareas precedentes el Departamento Ejecutivo Municipal informará tal situación al Honorable Concejo Municipal.
Art. 4: Las erogaciones que demande la ejecución de lo dispuesto en la presente serán imputadas a la partida presupuestaria del ejercicio fiscal correspondiente.
Art. 5: Comuníquese al Departamento Ejecutivo Municipal.
FUNDAMENTOS
La presente iniciativa, presentada en el marco de un nuevo aniversario del trágico 29 de abril del año 2003, tiene por objetivo plantear que el Departamento Ejecutivo Municipal evalúe la factibilidad técnica, operativa y económica de realizar los estudios que resulten necesarios para actualizar el Plan Director de Desagües Pluviales de la ciudad de Santa Fe.
Debe reconocerse que desde el año 2003, la ciudad ha tenido importantes avances en lo que refiere a la reducción de riesgos, se ha avanzando en la ejecución de desagües pluviales, troncales y secundarios, puntos de operación y bombeo, bombas, ejecuciòn y mantenimiento de terraplenes y defensas, obras ejecutadas con presupuesto local, provincial y nacional. Medidas que fueron acompañadas por otras de mitigación no estructurales que tienen que ver con trabajos de concientización, sistemas de alerta temprana, planes de evacuación, criterios de ordenamiento territorial – creación del indicador FIS, Distrito Zona de Seguridad Hídrica y Reservorios – entre otras que no son menores y que deberían seguir trabajándose y profundizando.
Sin embargo, la velocidad y magnitud de los cambios generados por el calentamiento global, el cambio climático y la variabilidad climática (cuyos efectos más visibles y esperados a futuro, son y seguirán siendo el riesgo y la vulnerabilidad hídrica, con inundaciones, anegamientos, sequías prolongadas pero también con aumento de eventos extremos) y las propias características del territorio santafesino nos presenta toda una serie de desafíos a enfrentar.
En ese marco, la clave está en seguir fortaleciendo las herramientas de mitigación y mejorar las condiciones de adaptación. Por ello, entendemos que el Plan Director de Desagües Pluviales, una de las principales herramientas con la que cuenta la ciudad en materia de planeamiento hídrico, debe actualizarse.
Para ello, proponemos una serie de parámetros a considerar: en primer lugar, las variaciones en el régimen de lluvias y los efectos del cambio climático. En nuestro país, se vienen observando aumentos significativos en la precipitación anual, en las principales ciudades de la zona húmeda, dentro de la cual se encuentra la ciudad de Santa Fe. Además, se manifestaron aumentos en la intensidad, es decir, en la cantidad de lluvia acumulada en 5 días, o la cantidad de lluvia por día, lo que no solo repercute en el aumento de la cantidad de lluvia total, sino además en el aumento de casos de lluvias extremas (muchos mm en poco tiempo). En todo el país aumentó significativamente el número de días de lluvia por encima de los 10 mm por día, principalmente en la zona húmeda, contribuyendo más al total anual de precipitación.
Por otro lado, Santa Fe no es ajena a la tendencia mundial del crecimiento de la urbanización, según estudios, la superficie del área urbana del Gran Santa Fe, se incrementó en 1.261 hectáreas (Ha.) entre el año 2006 y el 2016. De todas las hectáreas incorporadas el 81% tuvo como destino el uso residencial, generando una dispersión de la mancha urbana, por ello resulta central revisar los lineamientos del Plan Director de desagües ante el incremento de las áreas impermeabilizadas y modificaciones en el uso de la tierra.
Asimismo, entendemos central considerar las nuevas pautas de diseño de medidas de mitigación estructurales que buscan disminuir y desacelerar el escurrimiento a través del retardo, mediante sistemas de almacenamiento o infiltración. Particularmente, analizar la conveniencia de diseñar un Sistema de Gestión y Mitigación de Riesgos para la ciudad de Santa Fe, que incorpore al Plan Director de Desagües Pluviales, los retardadores públicos domiciliarios y los retardadores Públicos que pueden ejecutarse considerando el informe del estudio de zonas críticas por inundaciones frecuentes en la ciudad de Santa Fe, realizado por el Instituto Nacional de Agua (I.N.A.) en el marco de lo dispuesto por la Resolución HC.M Nª 14716.
En 2014, en cumplimiento de la Res. H.C.M Nº 14716, se suscribió un Convenio entre el INA y el DEM para que dicha institución realice estudios y/o evaluaciones cuantitativas tendientes a identificar puntos críticos y de interés ubicados en espacios públicos que sean susceptibles de ser retardados, y a establecer un orden de prioridades de intervención, de acuerdo al porcentaje de impermeabilización de cada cuenca, sobre la base de lo proyectado en el Plan Director de Desagües Pluviales.
Para todos los análisis se consideraron tanto la situación actual como situaciones prospectivas, suponiendo la materialización de obras proyectadas en el Plan Director. Se seleccionaron zonas críticas de anegamiento frecuente en cada una de las 26 cuencas de la ciudad, factibles de ser reguladas mediante distintos tipos de dispositivos y obras hidráulicas. La evaluación de cada zona crítica identificada fue considerada no sólo en términos hidráulicos, sino también desde parámetros topográficos y urbanísticos.
El resultado de dicho análisis, presentado en 2015 debe considerarse para evaluar la creación de un Sistema de Retardadores Pluviales Públicos, que junto con los dispositivos hidráulicos incorporados luego de la sanciòn de la Ordenanza Nº 11.959 de 2012 complemente al Plan Director aludido.
Para hacer frente al problema del riesgo y la vulnerabilidad hídrica es necesario posicionarse desde una planificación integral del saneamiento urbano que incorpore tanto medidas estructurales como no estructurales. Sin perjuicio de la clasificación entre medidas estructurales y no estructurales, en un contexto de acción climática, también pueden pensarse otro tipo de categorizaciones como puede ser la diferenciación entre medidas de adaptación, que apuntan a trabajar sobre las consecuencias, reduciendo la vulnerabilidad de cada sector y, por consiguiente, el riesgo; y medidas de mitigación que intentan influir en las causas que originan el cambio climático.
Pensar el Ordenamiento Territorial desde una visión sistémica e integral implica reconocer la estrecha relación que debe tener la infraestructura gris con la infraestructura azul y con la infraestructura verde, y para ello es fundamental el aporte de diversas disciplinas científicas y enfoques en la práctica del planeamiento espacial de los usos del suelo.
Por ello, entendemos importante que se evalúen las oportunidades que presentan medidas de adaptación para complementar el Sistema referido en el inciso precedente, con la promoción de soluciones basadas en la naturaleza, infraestructura verde o sistema urbano de drenaje sostenible.
La infraestructura gris es, básicamente, la infraestructura convencional preparada para hacer frente al riesgo hídrico que se compone por el sistema de desagües primarios y secundarios, canales, terraplenes de defensa, entre tantas herramientas, es decir, las establecidas en el Plan Director de Desagües de 2001; la infraestructura azul es en sí misma el sistema hidrológico del área o la región; la infraestructura verde, también entendido como soluciones basadas en la naturaleza (SBN) se define como la red interconectada de espacios verdes urbanos, periurbanos, rurales y silvestres que aportan funciones eco-sistémicas y servicios ambientales a la población humana. Entre ellas podemos mencionar: La “cesión de espacios verdes para nuevos loteos y urbanizaciones”, regulada por la Ord. 7677 Reglamento de Urbanizaciones y Subdivisiones, la cinta verde es decir superficie permeable destinada a césped y arborización prevista en el Reglamento de Edificaciones Ord. 7279, el Plan de arbolado público, las “Terrazas verdes o cubiertas naturadas”, entre otras.
Si bien por muchos años la infraestructura gris ha tratado de resolver el problema de la inundaciones, las consecuencias del cambio climático y de la variabilidad climática y las perspectivas futuras en relación a esos parámetros en todo el mundo ha obligado a revisar las formas y herramientas con las cuales hacemos frente al riesgo y la vulnerabilidad hídrica.
Por ello, ante un nuevo aniversario de aquel 29 de abril, que de alguna manera nos atravesó a todos como santafesinos, de modo directo o indirecto marcando un antes y un después, dejando a un tercio de la ciudad bajo agua en poco tiempo, con familias enteras que perdieron el esfuerzo de toda una vida, y muchas también que perdieron familiares, amigos, vecinos, queremos reafirmar el compromiso con el trabajo que desde nuestro espacio político y las gestiones del Frente Progresista Cívico y Social se han realizado para mitigar el riesgo hídrico y tener una ciudad más preparada.
Asimismo, como en anteriores oportunidades seguimos apostando al trabajo coordinado de la Municipalidad con las instituciones técnicas y educativas – el INA y la FICH – que desarrollan conocimiento sobre la temática, promoviendo convenios de colaboración para un trabajo conjunto y articulado.
Por lo expuesto solicito a mis pares el acompañamiento necesario para la aprobación de la presente iniciativa.